El jugador de la NBA Jonas Jerebko, alero de los Boston Celtics, es el nuevo propietario del equipo norteamericano Renegades, que ha pasado por un conflictivo año pero todavía mantiene rósters de Counter-Strike y Halo bastante competitivos.
Se trata de un nuevo e insólito cruce entre el baloncesto y los eSports, después de que el retirado jugador de los Lakers Rick Fox fundase Echo Fox, y Shaquille O'Neal invirtiese en NRG eSports. La novedad en esta ocasión es que Jerebko es un jugador en activo y con todavía unos años de carrera profesional por delante, ya que cuenta con 29.
El interés del jugador en los eSports se debe a que lleva jugando a Counter-Strike desde la adolescencia. Jerebko es sueco, uno de los países donde los deportes electrónicos (y en particular el Counter-Strike) están más implantados. El equipo Ninjas in Pyjamas, uno de los más emblemáticos, es de su país.
Dar estabilidad a una organización tumultuosa
El equipo Renegades mantendrá intacto su plantel de Counter-Strike pero prescindirá del resto de la organización. Sufrirá también un leve cambio de logo, pero mantendrá su estilo y su marca sin apenas cambios. Lo que sí intentarán es darle una mayor organización al equipo, y uno de los primeros pasos ha sido trasladar la residencia de Renegades de Australia a Detroit (Estados Unidos).
El equipo Renegades estuvo envuelto a principios de años en varios escándalos con la LCS norteamericana que le obligaron a vender su plaza en la competición, dañando su imagen. De hecho, con la adquisicón Jerebko se planteó cambiar por completo la marca del equipo, pero finalmente decidió mantenerla. No se sabe si, tras estructurar el equipo de CS:GO, se planteará volver a League of Legends.
